El motor principal para lograr que nuestros seres amados actúen diferente es el Amor.
El título de este post es “el Poder de un Pie”, porque veo como mi hijo con solo sentir mi pie cerca de él, se transforma, se anima y está listo para dar lo mejor de él en la escuela. Descubrí este poder de cambio en mis hijos al leer el libro “Los 5 Lenguajes del amor de los niños” de Gary Chapman, muchas cosas hicieron sentido y comenzamos un cambio en la forma de demostrarnos amor y llenar nuestros tanques de afecto cada día.
Gary Chapman nos describe los siguientes lenguajes del amor para nuestros hijos. Les comentaré un poco sobre cada uno de ellos.

Palabras de afirmación:
Debemos tener presente que las palabras tienen poder. Debemos identificar si nuestros hijos se sienten amados al recibir palabras que afirman el respeto, apoyo, misericordia, aliento, orgullo por ellos mismos y todo lo que representan. Un amigo cercano me comentaba que durante la cuarentena ha estado haciendo ejercicio con un youtuber. Él expresaba cómo esta persona no deja en ningún momento de transmitir palabras de afirmación para motivarlos en el ejercicio y como esa motivación verbal le ayuda a tener determinación para no detenerse y llegar hasta el final de la jornada del ejercicio físico.
Expresemos a nuestros hijos el amor con palabras de afirmación, cartas, notas de ánimo etc., les aumentará su autoestima y la seguridad en todo cuanto hacen.
Actos de Servicio:
“En todo amar y servir”, nos dice San Ignacio de Loyola en una de sus frases. Nuestros hijos o nuestro esposo (a) probablemente estén deseando obtener de nosotros actos de generosidad como brindarles tiempo especial y acompañarlos en sus actividades. A mi hijo Samuel le encanta disfrutar tocando el piano y saber que estamos ahí junto a él escuchándolo. Eso lo motiva a seguir adelante y a practicar más cada día. No olvidemos observar a nuestros seres amados y hacer por ellos lo que más les agrada.
Tiempo de Calidad:
Con todo lo que tenemos que hacer se vuelve difícil dar tiempo de calidad a nuestros hijos. Es muy importante que organicemos horarios y rutinas en nuestros hogares y asegurar que podemos darles ese tiempo de calidad a nuestros hijos. En nuestro hogar tenemos la agenda del mes de cada uno a la vista en la pared de nuestras habitaciones, de esta forma todos podemos conocer el horario de los demás y programar cita para proyectos específicos o bien para compartir un momento especial. Me encanta ver cómo los niños se sienten tan importantes al saber que tienen una cita con nosotros como papás. Ellos valoran mucho ese tiempo y nos da oportunidad de hablar y conectarnos con amor. Podemos escuchar y ser escuchados.
Recibir Regalos:
Mi hijo justo 10 días antes de llegar a sus 14 años me dijo que lo que él deseaba para su cumpleaños es que le diera una carta. Es un regalo diferente, especial y único. Por un lado, me sorprendió que a su edad, pidiera de regalo una carta, por otro lado, logré comprender lo importante que es para él que le expresen amor. Fue un momento hermoso. Los regalos no precisamente deben ser materiales o caros, basta con dar lo que el otro necesita y que nosotros lo demos desde el corazón, con amor y sin esperar nada a cambio.

Toques Físicos:
Justo este lenguaje de amor es el que me inspiró para este post. Uno de mis hijos como les comentaba antes ama el contacto físico. Es un chichi en mis brazos, le encantan los abrazos, besos, él disfruta muchísimo que le hable con cariño y lo consienta, que lo duerma y que mientras hace su escuela lo toque con mi pie o bien él estar tocando mi pie, este gesto tan sencillo lo ayuda y motiva a hacer su escuela.
